La historia de la zapatería
a nivel mundial es tan antigua como la misma historia del zapato. Es imposible
imaginar nuestras vidas sin poder utilizar zapatos. ¿Cómo serían nuestras vidas
sin zapatos?
“El
zapato es un accesorio de la vestimenta hecho con la intención de proveer
protección y comodidad al pie, mientras este realiza varias actividades”,
este es un concepto Wikipedia para el común de la gente. A esto se debe
incluir, que lo primero que ves de una persona son los zapatos y dice el dicho:
“Dime qué calzas y te diré quién eres”.
En Bolivia la historia del
zapato quizás tenga su origen con la abarka, utilizada por nuestros antepasados
y se sigue utilizando en nuestros días. De alguna forma, la
realización de zapatos se lo debemos a los zapateros.
Mi abuelo fue zapatero,
alguna vez de niño fui su ayudante y me hacía recoger clavos de la mesa y
ponerlos luego en las cajas respectivas por tamaño, uno por uno, toda una
bendita mañana, sin haber aprendido casi nada. Los de antes no querían que
aprendiéramos rápido, pues pensaban que una vez aprendido el oficio, de la
noche a la mañana, habría nacido la competencia…Yo fui ayudante a los seis con
cosas inútiles, incluso golpeando la suela húmeda.
Pero los zapateros tuvieron
que organizarse para poder reivindicar sus derechos laborales. En la colonia
hubo el gremio de los zapateros y en la república, según dato de Jean Russe, un
17 de junio de 1888 Pedro Ascui organiza en La Paz la Unión de Zapateros “San
Crispín” (Lucha de Clases, pág. 245). El 31 de octubre de 1954, se funda en la
ciudad de La Paz la Federación Sindical de Trabajadores en Calzados.
El 31 de marzo de 1951, a
iniciativa de Ignacio Laura, Benito Cabana, Félix Velásquez, Alejandro Villa y
Germán Durán, mi abuelo, se funda en Potosí el Sindicato de Trabajadores en
Calzado, con el propósito de “…aglutinar
a todos sus elementos en un haz de voluntades, para cumplir su fin social en
pos de la liberación de los trabajadores unidos en el sentimiento de reivindicación
– dice en el prólogo de sus ESTATUTOS, publicado en 1953 en la Imprenta La
Popular de Potosí”.
Más adelante en el mismo
prólogo, dice:
“Si
el Sindicato de los Trabajadores en Calzado, cumple solidariamente, todos los
postulados de éste Estatuto, contribuirá con dignidad colectiva y sindical a la
formación de la piedra angular en el mejoramiento del trabajador boliviano; por
tanto, encaminará también la propia independencia de nuestra patria, como deben
hacerlo los otros Sindicados, hasta alcanzar la verdadera justicia social, que
es la meta donde deben aspirar todos los pueblos libres. Lo contrario
significará pecar de traidores de nuestra clase y del proletariado todo”.
La
primera directiva estaba conformada de la siguiente manera:
SECRETARIO
DE GOBIERNO.- Eduardo Cueto
SECRETARIO
DE RELACIONES.- Alejandro Villa
SECRETARIO
DE ACTAS.- Félix Velásquez
SECRETARIO
DE HACIENDA.- Víctor Pérez
SECRETARIO
DE CONFLICTOS.- Aurelio Velásquez
SECRETARIO
DE PRENSA Y PROPAGANDA.- Liborio García
SECRETARIO
DE BENEFICIENCIA.- Nicolás Bravo
SECRETARIO
DE DEPORTES.- Agustín Bravo
SECRETARIO
DE CULTURA.- Teófilo Quiroz
SECRETARIO
DE NOTIFICACIONES.- Germán Durán, Benito
Cabana, Román Gárate y Salustio Flores.
De mi abuelo heredé varios
documentos del extinto Sindicato de Trabajadores en Calzado de Potosí y en
ellos supe como otro dato, que su personería jurídica fue reconocida por
Decreto Supremo No. 51248 del 25 de agosto de 1952, durante la Presidencia de
Víctor Paz Estenssoro.
Nómina de afiliados
Una de las páginas del libro de actas
Caso raro es la presencia de
la mujer potosina dentro de la nómina completa de afiliados del Sindicato de
Trabajadores en Calzado de Potosí, para presentarlo dentro de los documentos que
sirvieron para el trámite de personería jurídica. En la parte final de la
nómina con fecha de febrero de 1952 indica, Rosa de López y Leonor
de Uriburu.
Al parecer no eran las
únicas mujeres que estaban dentro del Sindicato de Trabajadores en Calzado de Potosí. En las
hojas del KARDEX, existen dos inscritas, Josefa v. de Veramendi, fecha de
ingreso 9 de mayo de 1953 y Dora P. de Villa, fecha de ingreso 10 de mayo de
1954.
Estos datos indican que el
papel de la mujer dentro de los sindicatos y en especial del Sindicato de
Trabajadores en Calzado de Potosí, tenía un papel no importante; pero se hacía notar de
forma limitada.
Toda la documentación
heredada del Sindicato de Trabajadores en Calzado de Potosí, lo sigo cuidando con mucho
celo, esperando hacer algo que valga la pena.- Nelson Van Jaliri.